El nexo atávico del hombre
como creador y distribuidor la información, está basado en normas y
conocimientos específicos acerca de cómo construir la estructura textual; desde
lo visual hasta lo meramente informativo con palabras y enunciados. La creación
de distintos tipos de documentos proviene del imaginario y la memoria temporal
del ser humano. Algunos, guiados por los designios de familias reales y otros
por convicción, con el primordial objetivo de compartir el conocimiento y una
exquisita o cruda visión de la vida. Los creadores son capaces de matizar verdades y crear mentiras;
son libres de codificar y esconder con simples palabras su verdadero
sentimiento.
El sólo hecho de conocer el
código incrementa el valor de una persona o comunidad. Pese a ello, el creador
comúnmente asume una postura de humildad ante la posibilidad de embriagarse de soberbia.
La memoria, la manipulación y la transcripción son elementos esenciales en la
creación de documentos textuales e informáticos.
El dios Thot, periodo tardio,
ca. 600 a.C.
Señor de las palabras de Dios,
inventor de la escritura y divinidad lunar. Su nombre significa “el que mide”. Pérez Cortes, Sergio. (2005). Escribas. México: UAM. 131 p.
Equipo de escriba encontrado
en una tumba cerca de Tebas, principios de la XVIII dinastía, ca. 1500 a.C. Orgulloso de su oficio, el
escriba se hacía enterrar con su equipo, como en este caso encontrado en una
tumba cercana al templo de Hatshepsut.
Pérez Cortes, Sergio. (2005). Escribas. México: UAM. 131 p.
Escriba, Saqqara, principios
de la V dinastía. 51 cm. el Cairo, museo egipcio.
El escriba mira hacia delante,
lo que le otorga un aire ausente, meditativo, lejano a la actividad misma de
escribir.
Pérez Cortes, Sergio. (2005). Escribas. México: UAM. 131 p.
Interpretación de jeroglíficos
(logogramas). Pérez Cortes, Sergio. (2005). Escribas. México: UAM. 131 p.
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